Si eres de los que toman su medicamento con refresco, leche o alcohol, cuidado. Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han advertido sobre las consecuencias de ingerir pastillas con este tipo de líquidos, así como cortarlas a la mitad.
“Existen fármacos que al interactuar con el alcohol llegan a causar desde disminución del efecto del medicamento administrado hasta una intoxicación”, explicó el IMSS. Y agregó que lo mismo puede ocurrir al tomar refresco, ya que la cantidad de azúcar y algunos compuestos como la cafeína interfieren con el resultado del tratamiento.
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